Según ha informado la Policía Nacional, la pasada madrugada una patrulla observó que un hombre cogía un taxi durante el horario del toque de queda. Al percatarse de la presencia policial, el taxi empezó a realizar un itinerario sin mucho sentido. La patrulla no intervino si no que hizo un seguimiento discreto.
En un momento dado, el pasajero abandonó el taxi y siguió a pie por una de las calles del centro hasta que se detuvo en un portal. En ese momento, los agentes le interceptaron y le preguntaron los motivos de transitar en horario no permitido. El hombre admitió que se dirigía a una casa de citas.
La patrulla pidió refuerzos y se organizó un dispositivo para comprobar la veracidad de esta afirmación. Uno de los agentes que no vestía de uniforme se hizo pasar por cliente y llamó a uno de los timbres. Una vez en la vivienda constató que, en efecto, había mujeres y varios clientes
Una vez comprobados los hechos, los agentes realizaron una inspección y levantaron seis actas por infracción a la normativa sanitaria tanto a las trabajadoras como a los clientes que allí se encontraban.
Igualmente, los agentes han solicitado la clausura del lugar por incumplimiento de la normativa de la Comunidad Autónoma en materia de apertura de locales y establecimientos públicos.
El dispositivo fue llevado a cabo por agentes del Grupo Operativo de Respuesta de la Comisaría de Distrito Centro de Alicante y de la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaría Provincial de Alicante.
