El óxido nitroso (conocido también como gas de la risa) se ha convertido en una droga recreativa moderadamente popular en algunos países. En España también ha entrado. Este gas tiene un olor dulce que provoca alucinaciones y estado de euforia en la persona que lo inhala. Ahora, la Guardia Civil ha investigado a un joven español de 22 años tras ser interceptado en Jávea con 24 botellas de esta sustancia.
Durante un control de seguridad ciudadana en la zona de Cala Blanca, los agentes observaron un vehículo que les resultó sospechoso. Había dos individuos en su interior y otros dos varones fuera del coche. Al aproximarse, los investigadores detectaron un fuerte olor que identificaron como marihuana, lo que motivó un registro del vehículo.
Durante la inspección, se encontraron dos globos de colores debajo de los asientos delanteros, junto con un bote de plástico que contenía restos de marihuana. Además, se halló una bombona metálica azul, que contenía óxido nitroso. El registro continuó y se localizaron otras 23 bombonas del mismo gas en diferentes partes del vehículo, lo que sumaba un total de 24 botellas.
La Guardia Civil ha advertido del peligro para la salud que supone respirar este gas. Su uso está limitado al ámbito hospitalario donde se utiliza como coadyuvante de la anestesia general o la analgesia en el quirófano o sala de partos.
El propietario del vehículo ha sido acusado de un delito contra la salud pública.