El ciclista vila-relanse salvó los muebles de la delegación española. Mora, de esta forma, sigue aumentando su amplio número de medallas para confirmarse como una auténtica leyenda en esta disciplina a sus 36 años
Desde el inicio de la prueba dejó claro que era uno de los corredores más fuertes en el velódromo de Apeldoorn. En las primeras 30 vueltas ya logró ganar un sprint y coger vuelta. A su rueda se adhirió rápidamente Niklas Larsen, que acabó siendo el ganador. El danés no se despegó de Mora y juntos lograron una segunda vuelta, lo que acabó convirtiendo la prueba en un mano a mano.
Finalmente Larsen ganó los sprints decisivos y acabó imponiéndose a Mora por 8 puntos. El danés finalizó la carrera con 66 puntos, Mora lo hizo con 58 y completó el podio el francés Oscar Nilson-Julien con 45.
Un palmarés inigualable
De esta forma el vila-realense suma 8 medallas europeas (6 de ellas de oro) y 6 en campeonatos del mundo. Cabe recordar que en 206 se coronó campeón del mundo en la categoría de scratch. De la misma forma ha conseguido dos diplomas olímpicos y se prepara para su tercera participación este próximo verano en París
“Era el último día del Europeo y quería luchar esta medalla por toda la Federación Española de Ciclismo y por todos aquellos que nos apoyan. Es una excelente manera de empezar este año, que espero que sea muy bonito. Sabía que tenía que salir muy fuerte desde el inicio, he arrancado solo, he conseguido puntos y una vuelta. Me la he jugado, sabía que había que morirse en esta prueba, no he mirado atrás, sin pedir relevo y quizá esa generosidad la he pagado un poco al final. A 40 vueltas lo he intentado otra vez, pero ahí ya me faltaba un poco. Es una medalla muy luchada y me quedo muy contento con este resultado”, explicó Sebastián Mora desde la pista de Apeldoorn.