Las lluvias de finales agosto dejan en toda la provincia agua embalsada y, por lo tanto, riesgo de que aumente la población de mosquitos.
El plan especial se basa en un tratamiento larvicida intensivo en todas las zonas urbanas, especialmente en zonas de playa y en el Cuadro de Santiago.
El Ayuntamiento de Benicàssim también ha hecho un llamamiento a la colaboración ciudadana para que vigilen en sus hogares que no haya zonas con agua estancada. Recomiendan limitar las actividades en exterior durante las primeras horas del día y últimas horas de la tarde.