El Ayuntamiento de Cabanes ha cerrado esta tarde la edición 509 de la Fira de Sant Andreu. Una feria que, a pesar del mal tiempo del fin de semana, ha vuelto a demostrar su capacidad de convocatoria y la importancia que ostenta dentro del sector agrícola de la provincia de Castellón. A lo largo del fin de semana, miles de personas se han acercado a Cabanes para disfrutar de los expositores y las numerosas charlas y actividades que han conformado el programa de este año. Ha sido la primera feria en la que las asociaciones locales han tenido voz en la organización de actos.
Según el concejal de Ferias, Carles Mulet, "hemos conseguido que las asociaciones tengan voz y se impliquen en la programación. La edición de este año nos ha servido a todos como modelo para aprender y poder mejorar la del año que viene ". El objetivo es "lograr un cambio de modelo que haga la feria más participativa y abierta a todos los agentes locales, también a los productores de proximidad que puedan ver en esta cita un foro para dar a conocer sus proyectos relacionados con el desarrollo local". En este año de impás "se han puesto los cimientos para que la feria del 2017 pueda recuperar el esplendor de un evento clave para el municipio". En la jornada de hoy domingo han continuado abiertos los talleres familiares, los juegos tradicionales con 'Jugafusta' y los concursos. El Ayuntamiento ha presentado el proyecto del banco de tierras que ha sido acogido con gran interés por parte de los agricultores del municipio. También ha contado con gran participación la presentación del libro de Josep Vicent-Mestre "La Ribera, una terra vora el mar", así como todas las actividades organizadas por la A.C. Pena Els Gallos.
En general, la Fira de Sant Andreu se ha desarrollado sin incidentes más allá de la meteorología. El Equipo de Gobierno ha querido agradecer la gran participación de los vecinos y vecinas de Cabanes, las asociaciones y las empresas implicadas en que la feria haya sido, un año más, todo un éxito.
