Después de 22 días del ciberataque al ayuntamiento de Castellón, el consistorio sigue sin tener todos sus sistemas operativos y desconoce todo el contenido de la información robada.
Ahora, ha decidido establecer un plan para avisar a los ciudadanos y empleados afectados por esta cuestión. La idea es comunicarles que acciones legales pueden llevar adelante.
La concejala de innovación tecnológica, Mónica Barabás, ha hecho un llamamiento para que nadie utilice esa información robada y advierte que, de hacerlo, podría estar incurriendo en un delito.
En estos momentos funciona la sede electrónica y la atención presencial y se han ampliado los plazos para solicitar ayudas. El ataque está siendo investigado por la Policía Municipal y también por el Centro Criptológico Nacional.
