Castellón proyecta una mayor integración de los grupos periféricos del Sur con las vías urbanas

El documento-borrador del Plan General propone una mayor integración de los grupos periféricos del distrito Sur con las vías urbanas y las infraestructuras de la ciudad consolidada. Es una de las principales propuestas que se han expuesto este miércoles en la reunión del proceso participativo en los barrios sobre el Plan General que ha abordado el planeamiento de la zona denominada Estepar-conexión con Almassora. Se trata de grupos como Roquetes, San Andrés, San Bernardo, San Francisco, La Unión, que se catalogará como suelo urbano, o el Grupo Lourdes así como otras zonas edificadas en la avenida Valencia, Gran Vía y caminos Pi Gros y Roquetes. En el plano urbanístico, se prevé acabar las zonas semiurbanizadas, proponiendo en algunos casos pequeñas ampliaciones del ámbito urbano/urbanizable consiguiendo un borde de ciudad ordenado e integrado con el paisaje.

Un ejemplo sería una ampliación de 8.600 metros cuadrados del suelo de uso terciario, dotacional o verde en el Grupo San Andrés para desarrollar aquella infraestructura que demanden los vecinos y servirá para completar la trama urbana. Además, también se diseñan ámbitos de minimización de impactos dentro del suelo no urbanizable en los que existen núcleos de vivienda consolidada con una cierta densidad y compacidad. Sobre estos núcleos se podrán establecer medidas que minimicen su impacto territorial a través de la redacción de planes especiales de minimización de impactos.

El concejal de Ordenación del Territorio, Rafa Simó, ha apuntado que “esta mayor conexión no solo se plantea en lo urbanístico sino también con el desarrollo de varios ejes ciclopeatonales que garanticen la conexión segura de los grupos periféricos con el centro de la ciudad”. El edil ha defendido que “vivir en un barrio periférico no ha de significar vivir aislado de la ciudad y la propuesta de ordenación urbanística que planteamos en esta zona y en otras similares plasma esta voluntad de coser e integrar a los barrios”.

La reunión ha contado con la participación de la concejala de la Actividad Económica y Empleo, Patricia Puerta y de la vicealcaldesa, Ali Brancal, además del concejal de Ordenación del Territorio, Rafa Simó, el cual se ha encargado de explicar a los vecinos de los distintos grupos el nuevo Plan General. De este modo, los vecinos han preguntado sus dudas a los técnicos y concejales sobre la nueva ordenación. Así, han surgido dudas respecto a los distintos usos del suelo industrial y sobre la decisión de hacer urbanizable ciertas zonas y no otras. En este sentido, los técnicos han definido su procedimiento a la hora de urbanizar teniendo en cuenta la cantidad de viviendas y la dispersión entre ellas. Además, han puntualizado que las casas en suelo no urbanizable se podrán mantener y en ciertos casos dispondrán de los servicios e infraestructuras que necesiten.

Los vecinos también han recordado la necesidad de habilitar más zonas verdes, como parques para los niños, en los grupos periféricos. El equipo del ayuntamiento ha reiterado su deseo “de aumentar y mejorar estas dotaciones”, por lo que en el Plan General ya se encuentran señalizadas las zonas de los Grupos donde podrían ubicarse estos espacios verdes. Entre las propuestas que integran el sistema viario de esta zona, destaca el proyecto para convertir la antigua nacional 340 en el bulevard de la Plana, potenciando el transporte público y la conexión peatonal y ciclista de Norte a Sur del término municipal y conectándolo con Almassora. Otro aspecto que ha querido destacar el concejal de Ordenación del Territorio ha sido el de la infraestructura verde. Un elemento importante de esta zona es la acequia Mayor, desde el límite del término municipal con Almassora hasta el Molí Casalduch. “No solo queremos visibilizar su existencia sino que en los planos y en los planes consideramos que es un elemento clave de nuestro patrimonio histórico y cultural que merece ser conservado y protegido”.

En cuanto al suelo industrial y terciario, se consolidan estos usos en la franja del territorio entre la ronda Sur y el acceso Sur al Puerto y también en la franja comprendida entre la avenida de Valencia y el camino Pi Gros, dado que son zonas con programas ya en desarrollo o con edificaciones consolidades casi en su totalidad. El Plan General solo plantea una zona de nueva urbanización formado por tres ámbitos discontinuos que se clasificarán como uso industrial para cerrar la urbanización de la onza delimitada entre la antigua N-340, la canalización del barranco de Fraga y las avenidas de Valencia y Pi Gros.