La Fiscalía de Castellón ha dedicido archivar una denuncia interpuesta por el Grupo de Estudio y Conservación de los Espacios Naturales (GECEN), en la que comunicaba un vertido de aguas negras en el Puerto de Castellón, al no apreciar indicios de delito contra el medio ambiente.
En el decreto de archivo, Fiscalía señala que el informe del EPRONA indica que se están vertiendo aguas que parecen ser fecales y que probablemente el vertido tiene su origen en la Marjaleria, en la cual hay viviendas que posiblemente viertan esas aguas.
Mientras el Ayuntamiento de Castelló informó que las coordenadas del vertido corresponden a la salida de la acequia 'El fil' y 'Camino Viejo del Mar' procediendo al sellado de la primera y su reconexión a la red de alcantarillado dada la imposibilidad de inspeccionar y controlar ese tramo.
El consistorio comunica que se toman medidas tales como inspección periódica de las acequias a los efectos de advertir posibles vertidos para proceder a su cese y que se están implantando sistemas de retiradas de gruesos y flotantes de los desbordamientos en episodios de lluvia, además de mallas de retención y tamices, según ha informado GECEN. Por su parte FACSA realizó diversas inspecciones a la red de alcantarillado en fecha 19 de abril de 2024 y encomendó diversas actuaciones a la empresa BECSA.
La Fiscalía advierte que el delito puede apreciarse en el futuro si no se culminan las actuaciones necesarias para minimizar el impacto de los desbordamientos.
INSPECCIONES PERIÓDICAS
La Fiscalía, así mismo, hace constar que los agentes actuantes van a realizar inspecciones esporádicas en el punto de vertido para comprobar la eficacia de las medidas adoptadas por el Ayuntamiento de Castelló.
La asociación ecologista realizará un seguimiento del vertido y ha exigido que "se acabe ya con el vertido de fecales procedente de unas acequias convertidas en cloacas y que, como se indica en las Diligencias de Investigación Preprocesal, son las viviendas las que posiblemente viertan esas aguas".
"El caos urbanístico y una ordenación del territorio histórica lamentable lleva a una degradación ecosistémica que se manifiesta en vertidos tan evidentes e impactantes como el denunciado. La Ley de Restauración de la Naturaleza, aprobada recientemente, es una oportunidad para afrontar el estado medioambiental en el que se encuentran las aguas de la Marjaleria y restaurar los servicios ambientales que el humedal nos proporciona", ha dicho.
"Negar la propia existencia del humedal y actuar deficientemente ante vertidos, construcciones ilegales, pozos y aterramientos ha llevado a una situación de degradación manifiesta que exige soluciones atendiendo a la legalidad y a la hoja de ruta verde marcada por la normativa europea que recordamos es de obligado cumplimiento", ha concluido GECEN.
