La iniciativa de crear este pequeño huerto surge con el propósito de proporcionar momentos de alegría a estos pequeños valientes y a sus familias, ofreciéndoles un espacio donde cultivar y disfrutar de las plantas, aprovechando los beneficios terapéuticos, educativos y recreativos que ofrece esta actividad.
Para la construcción del huerto, Infertosa proporcionó todos los materiales necesarios y contó con la colaboración de su agencia de marketing Infomeik, que contribuyó con la digitalización y la coordinación de diversos aspectos del proyecto. Además, se unió al esfuerzo el Campus Adventista de Sagunto, cuyos jardineros y alumnos dedicaron varias jornadas para la construcción en sí. De esta manera, varias empresas se unieron para hacer posible este bonito proyecto, consiguiendo un pequeño huerto funcional con diferentes parterres, fácil de mantener gracias al riego automático, y seguro y atractivo para los niños.
"En nombre de Infertosa, agradecemos profundamente a la Casa Ronald McDonald por brindarnos la oportunidad de participar en esta bella iniciativa, así como a todas las empresas y colaboradores involucrados, incluyendo a Huertos Urbanos de Malilla por su apoyo solidario para el mantenimiento regular del huerto. Su generosa colaboración y dedicación han hecho posible aportar nuestro granito de arena para alegrar la estancia de las familias de la Casa Ronald, donde algunos pequeños ya pueden disfrutar recogiendo las primeras fresitas recién cultivadas.”, señala la empresa.