Juzgan en Castellón a tres hombres por abusos sexuales a cuatro mujeres

La Audiencia Provincial de Castellón sienta en el banquillo de los acusados desde este lunes y hasta el próximo miércoles en diferentes juicios a tres hombres acusados de varios delitos de abusos sexuales, cometidos presuntamente contra tres niñas y una joven.

El fiscal pide 22 años de prisión para uno de los procesados, a quien se le acusa de abuso continuado a dos hermanas, con cuya familia mantenía una relación de amistad. Las niñas tenían 9 años en el momento de los hechos.

Por otro lado, el ministerio público reclama cinco años de cárcel a otro de los enjuiciados por abusar de su hija de 10 años en un establecimiento público. Y por último, pide dos años y medio a otro de los procesados por abusos sexuales cometidos contra su hijastra de 28 años.

El primero de los juicios empieza este lunes contra un hombre acusado de abusar sexualmente de su hija de 10 años de edad, según han informado fuentes del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana. Los hechos sucedieron en el verano de 2017 cuando, según mantiene el Ministerio Público, el acusado, de 57 años, se encontraba en un establecimiento de hostelería de la playa de Castellón en el que sometió a la niña a tocamientos delante de los empleados, que avisaron a la policía. El fiscal pide una pena de cinco años de prisión por un delito de abuso sexual a menor.

El martes, 7 de noviembre, la Audiencia juzga a un hombre acusado de abusar sexualmente de dos hermanas menores de edad. Según el fiscal, los abusos se produjeron en el año 2016 cuando el procesado, que tenía una relación de amistad con la madre de las menores, se llevó del domicilio familiar a una de las niñas y a otro hermano a comprar unos dulces. El fiscal pide una pena de 22 años de prisión por dos delitos continuados de abusos sexuales a menor.

Y finalmente, la Audiencia Provincial celebra el próximo miércoles otro juicio contra un hombre acusado de abusar sexualmente de su hijastra, de 28 años. Los hechos sucedieron entre los meses de junio y julio de 2017 en el domicilio familiar, en el que la víctima comenzó a residir un año después de que el acusado, de 50 años, se casara con su madre. Según relata el fiscal en su escrito de acusación, el hombre aprovechaba los momentos que se encontraba a solas con su hijastra para someterla a tocamientos, agarrarla con fuerza e intentar besarla. En una ocasión, le mostró los genitales a la víctima y le envió fotos de carácter sexual por el móvil. El fiscal pide una pena de dos años y medio de prisión por un delito continuado de abuso sexual.