El ayuntamiento de Castelló, dentro de su Plan de Mejora de los Mercados Municipales, abordará la mejora del Mercat de Sant Antoni por eso, la alcaldesa de la ciudad, Begoña Carrasco, mantuvo ayer una reunión con los comerciantes de la infraestructura. Unas obras que contarán con una presupuesto de 400.402 euros, a través de los fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
El proyecto de reforma, que se consensuará con los vendedores, según la alcaldesa, va a permitir adaptar este mercado, que nació a principios de los años 60 y que ha contado con varias reformas a lo largo de estos años, adaptarlo a las necesidades y condiciones de eficiencia energética y accesibilidad propias del siglo XXI. Además, se abrirá a nuevos usos de tipo gastronómico que puedan atraer turistas.
Novedades en el exterior e interior
El proyecto supone una renovación tanto del espacio interior como el exterior y contará con una celosía de cerámica, pavimento de gres porcelánico y tendrá en su distribución hasta 10 puestos de venta; zona de degustación, baños adaptados y cuarto destinado a limpieza y residuos que sumarán un total de 374 m².
También se modificará el interior y cada puesto contará con un espacio individualizado, que se podrá cerrar con una persiana para cada punto de venta, lo que permitirá que cada vendedor pueda trabajar en franjas horarias distintas.
Inicio de las obras
La alcaldesa de Castellón se ha comprometido con los vendedores a minimizar el impacto de las obras y aprovechar el cierre del mes de agosto para acometer el grueso de las mismas. El resto de meses se podrá compatibilizar obra y venta para no perder oportunidades de negocio.
Los trabajos se podrían iniciar en el mes de julio y se prolongarían hasta antes del inicio de la campaña de Navidad.