Las ayudas directas que reclama el sector fabricante de baldosas cerámicas no dependen de Bruselas sino del Gobierno de España. Así lo reclama la patronal cerámica ASCER que advierte que debe ser la administración central quién debe velar por la continuidad de la industria de la que depende gran parte de la economía de la provincia de Castellón. La Comisión Europea definió en marzo el marco temporal de ayudas de estado que establece los niveles de ayuda que cada país de la unión puede destinar a sus empresas. En él se establecen distintos niveles en función de la situación de cada sector y se incluyen ayudas de hasta 2 millones de euros por empresa para las gasintensivas, de hasta 25 millones si están en pérdidas y de hasta 50 millones para aquellos sectores afectados especialmente por la situación, entre los que se encuentra las baldosas cerámicas.
En cambio, dice ASCER "el gobierno español solo aportó una cifra tope de 400.000 euros, que ya desde el primer momento se calificó como insuficiente". Mientras, como añade la patronal cerámica "los principales competidores europeos del azulejo español, los fabricantes italianos, ya están recibiendo ayudas contundentes de su gobierno.
El secretario general de ASCER, Alberto Echavarria, lamenta que la falta de ayudas contundentes a la industria española está conduciendo a una pérdida de competitividad notable frente a nuestros vecinos europeos y está generando una situación de distorsión del mercado comunitario.
Este viernes el presidente nacional del Partido Popular, Alberto Nuñez Feijóo, visitará Castelló de la Plana para reunirse con el sector cerámico y conocer su situación. Lo ha anunciado hoy el presidente del PP de la Comunidad Valenciana, Carlos Mazón.
Recordemos que 400 empleados de la empresa Todagres, el Grupo Halcón y la Azulejera Alcorense podrían perder su trabajo. Estas compañías han presentado ERE's debido a los elevados costes del gas.
