Residencia Castellón

Primar los intereses de los demás por encima de los particulares y renunciar a la parcela privada para anteponer su trabajo, ha sido el gesto de los 76 trabajadores y trabajadoras de Residencia Castellón que decidieron confinarse en la residencia para proteger la vulnerabilidad de sus 115 usuarios. La decisión fue personal y llegó sin titubeos en el peor de los momentos de la crisis sanitaria, cuando el número de contagiados aumentaba día a día, y con resultados devastadores. Se confinaron con el objetivo fue poner freno a la propagación del virus, de hecho en la residencia no se ha producido ni un solo contagio.

Esta decisión aplaudida por la sociedad también lo ha sido por el jurado de los premios Onda Cero Castellón, que ha puesto en valor el esfuerzo, la dedicación y la solidaridad del equipo humano y profesional de Residencial Castellón, otorgando el premio Onda Cero de la Salud 2020.

La experiencia será inolvidable, porque ambas partes han echado raíces más profundas. Mantener en forma a los ancianos, hacer de psicólogos y de confesores, poner sus móviles particulares para hacer vídeo llamadas a las familias, son gestos que quedarán como una huella vital profunda para ambas partes, tras este confinamiento usuarios y trabajadores son parte de una misma familia y así, con el ejemplo, nos lo han hecho sentir a todos.