La UNIÓ de Llauradors pide que la Unión Europea efectúe una auditoría de todo el sector citrícola argentino desde el punto de vista fitosanitario y continúe con la suspensión de las importaciones la próxima campaña hasta garantizar que sus cítricos salen de aquel país sin plagas.
La organización aboga por la implantación de las inspecciones en origen para todos los países terceros y que las importaciones entren por un puerto de la UE donde se garantice la presencia de un número suficiente de inspectores expertos en plagas y enfermedades citrícolas y con un porcentaje de muestras analizado representativo.
La Unió apuesta por la obligación del tratamiento de frío en el transporte y por la prohibición en la producción y manipulación del uso de materias activas que no estén autorizadas en la Unión Europea.