CON MARTA FULLERAEl voluntariado en Uganda, un aprendizaje de vida
Último capítulo de la Voz de las Luciérnagas y el más difícil de contar, porque ya hay distancia de por medio. La experiencia acabó en cuerpo, pero no en alma y corazón, que todavía habitan en Fort Portal. Una experiencia que sirve como lección de una vida que dista tanto a la nuestra, que lo único que nos puede enseñar es que sin nada , sí se puede, y que sin prisas también se llega a todos los sitios. Que el poder del cariño acapara toda la atención de los voluntarios que van por un tiempo y vuelven con otra visión de vida.
ondacero.es
CASTELLON | 29.04.2021 14:39