Los hechos se produjeron el sábado, cuando una familia española que se encontraba de turismo en Oropesa, zarpó a las seis de la tarde con una embarcación de recreo a motor que habían alquilado hasta las ocho de la tarde.
Tras comprobar que a la hora convenida no habían devuelto la embarcación, la empresa de alquiler dio aviso en torno a las 21 h a los servicios de emergencia, temiendo que hubiera sucedido algo.
Rápidamente, un equipo de la Unidad de Rescate Acuático, URA, de bomberos del Consorcio Provincial de Castellón, inició la búsqueda dentro del mar, localizando poco antes de las 22 h de la noche a la embarcación desaparecida, y que hallaron a unas tres millas de la costa frente a la playa de Morro de Gos de Oropesa.
La barca se encontraba volcada y prácticamente hundida, quedando a vistas una pequeña parte de la misma, sobre la cual los bomberos hallaron a una menor de unos 10 años y a un hombre que al parecer era el tío de la niña. Dentro del agua, y agarrados a la barca con grandes dificultades, se encontraban los padres de la menor.
Los cuatro ocupantes se encontraban exhaustos, ya que al parecer el vuelco se había producido tres horas antes, sobre las siete de la tarde, cuando regresaban de hacer una ruta por Benicàssim. El fuerte viento y oleaje que se originó a última hora de la tarde habría influido en el vuelco.
Los bomberos de la Unidad de Rescate Acuático del Consorcio se lanzaron al agua para rescatar a las cuatro personas, en medio de unas condiciones marítimas complicadas. Tras subirlas a la embarcación de rescate del Consorcio, los bomberos las trasladaron al puerto de Oropesa, donde los servicios sanitarios se hicieron cargo de la familia para revisar su estado.
