Así lo indican los arqueólogos contratados por la mercantil Aparcisa, concesionaria del proyecto de construcción de un nuevo mercado, en su informe preliminar remitido a la conselleria de Cultura que tiene pendiente de emisión el informe definitivo de las excavaciones arqueológicas, a partir del que se establecerá si el proyecto adjudicado puede o no seguir adelante y en qué condiciones concretas.
Según ha desvelado este jueves el colectivo ciudadano contrario al proyecto adjudicado, ese informe señala que los hallazgos “han permitido averiguar y comprender la evolución del espacio durante diez siglos y resaltan el deterioro de las estructuras”, escondiendo el subsuelo del actual Mercado Central restos de un asentamiento islámico previo a la creación de la medina.
Además, ese informe de los arqueólogos recoge que los dos enterramientos localizados junto a una esquina del edificio próxima a la calle Victoria son de mediados del siglo X, correspondiendo a dos personas adultas, un hombre y una mujer, enterrados en posición decúbito lateral derecho, sin ajuar ni adornos personales, en estrechas fosas y con orientación a La Meca, según el rito islámico. Del mismo modo, los arqueólogos apuntan en el estudio que, de haber más enterramientos de este tipo, deben estar situados al Este de los exhumados.
El informe preliminar de la excavación contempla la posibilidad de que un muro de mampostería de 3,20 metros de longitud y 0,48 de altura que delimitaría alguna propiedad esté relacionado con el primer asentamiento islámico de lo que hoy es Elche.
Fosas y silos
Las fosas y silos islámicos sacados a la luz por las excavaciones arqueológicas, ocupan 555 metros cuadrados, un tercio de la excavación y, según se señala en el informe arqueológico, fueron construidos entre finales del siglo X y el siglo XII. Del interior de las primeras se han extraído gran número de piezas en buen estado de conservación como candiles, jarros, aguamaniles, jarras, jarritas, metopas, jofainas y vajillas de cocina son algunos de los objetos recuperados.
De esa misma época es una vivienda, o conjunto de dos, que ocuparían 200 metros cuadrados, de los que solo son visibles 60 metros, y que están alterados por construcciones posteriores.
Este edificio viene a sumarse a la trama urbana islámica que ha ido apareciendo durante las excavaciones llevadas a cabo en lo que fue la medina de Elche y de la que forman parte los baños árabes localizados en la plaza de la Fruta, a las puertas del mercado.
También se han encontrado restos de los siglos XV-XVIII.