La flota pesquera de Santa Pola sólo podrá salir a faenar este año entre 120 y 140 días según la última disposición de la Unión Europea. Esta reducción sumada a los elevados precios de los combustibles y la subida de los costes de mantenimiento de las embarcaciones, ha colocado a los pescadores en una situación que califican de insostenible. Así lo exlica en esta enrevista José López Chacopino, Patrón Mayor de la Cofradía de Pescadores.
Por el momento, las embarcaciones están saliendo a faenar en alternancia a fin de repartir los días en que tienen permitido hacerlo. Ésta, sin embargo, es solo una solución a medias. Los pescadores insisten en que ellos son los principales defensores de la protección de las especies marinas y señalan errores de los mandatarios como el hecho de que, en aras a proteger a los atunes, están propiciando una sobrepoblación de esta especie que está acabando con bancos enteros de otros peces como la merluza o los pulpos.
Por el momento la flota de Santa Pola no se plantea llevar a cabo movilizaciones y confían en que el apoyo de las autoridades autonómicas y nacionales de sus frutos en defensa de su sector para evitar su desaparición.
El amarre definitivo de sus 36 barcos supondría la pérdida de 200 puestos de trabajo directos y cerca de medio millar de indirectos.
