Desde que son cachorros, los dueños de perros deben acostumbrarlos a convivir en sociedad, tanto en la calle como en el entorno doméstico. Incluso cuando todavía no pueden salir a la calle por si mismos, conviene sacarlos en brazos para que se acostumbren a ruidos como el de los coches, los niños jugando o los ladridos de otros perros. Según nos explica el experto Joan Pagés, los perros que inician su socialización a la edad adecuada "son menos propensos a tener miedo o incluso a ser agresivos ya que reconocerán los estímulos y ruidos externos y los habrán interiorizado".
Con el educador de Clínica Fionetta de Elche, hablamos también en esta entrevista en Más de uno Elche-Comarcas del Vinalopó, de algunos consejos para llevar a cabo este proceso y cómo los dueños de mascotas podemos superar los obstáculos que es habitual encontrar en este proceso de aprendizaje de la socialización de nuestros peludos amigos.
Las recompensas y los estímulos positivos, y la paciencia serán las mejores herramientas para acompañarlos en este proceso y disfrutar al máximo de su compañía haciendo que ellos también se sientan más felices y seguros.