DISPOSITIVO DE EMERGENCIA POR LA OLA DE FRÍO

Un total de 41 ilicitanos sin hogar duermen ya en el Centro de Acogida de la Fundación Conciénciate

La Concejalía de Acción Social, Cáritas, Cruz Roja, Elche Acoge, Protección Civil, Policía Local y Conciénciate recorren las calles, ofreciendo cobijo a cerca de un centenar de sintecho censados en Elche

Mayte Vilaseca

Elche |

Elche ha puesto en marcha un dispositivo especial de emergencia para personas sintecho ante la notable bajada de temperaturas que se agudizará a lo largo de esta semana. Está coordinado por la Concejalía de Acción Social y en él participan Cruz Roja, Caritas, Elche Acoge, Conciénciate, Protección Civil y la Policía Local.

En esta entrevista doble, el presidente de Conciénciate, Gorka Chazarra y el presidente de Cruz Roja, Antonio Ramón Guilabert, explican su participación en este dispositivo.

De hecho, en el Centro de Acogida de la Fundación Conciénciate, que está habilitado con 48 camas, se ha acogido en la dos últimas noches a 41 personas.

Según ha explicado el presidente de Conciénciate, Gorka Chazarra, el perfil mayoritario de personas acogidas es el de varones jóvenes de entre 20 y 27 años, algunos de ellos procedentes de centros de menores que abandonaron al cumplir la mayoría de edad.

En el Centro de Acogida, además de una cama, disponen de alimentos, duchas, lavandería y apoyo por parte de los voluntarios y los trabajadores sociales.

Según los últimos datos facilitados por el Gobierno de España, se estima que en Elche viven habitualmente entre 95 y 100 personas sintecho.

El dispositivo de emergencia por las bajas temperaturas que se ha activado comienza con el contacto directo en la calle con estas personas para ofrecerles bebida caliente y plantearles la opción de acudir a los centros de acogida, tanto de Cáritas como de la Fundación Conciénciate. Ese primer contacto es fundamental, según explica el presidente de la Asamblea Local de Cruz Roja en Elche, Antonio Ramón Guilabert, quien señala que " lo más importante es conocerles y escucharles. El apoyo en la calle, calor en los centros de acogida y seguimiento individualizado de cada caso, persiguen un objetivo común: devolver la dignidad a quienes por distintas circunstancias se han quedado sin hogar, y apoyar su reinserción social.