El mercado laboral de los tres municipios de la comarca del Baix Vinalopó han comenzado el año con los signos de alto índice de temporalidad en la contratación característicos de los últimos años.
Aunque la contratación creció el pasado año respecto al ejercicio anterior, prácticamente nada cambió en ese aspecto a lo largo de 2018, anualidad en la que en el conjunto de la misma nueve de cada diez contratos registrados fueron temporales en Elche, Crevillent y Santa Pola.
Ese índice de temporalidad se cifra en Elche y Santa Pola en el 88%, mientras que en Crevillent es del 85%.
También ha dejado claro el año 2018 que la contratación castiga más a las mujeres que a los hombres en el conjunto de la comarca. En Elche la diferencia entre ambos géneros es de 8 puntos a favor del masculino que suma el 54% de los 79.095 contratos formalizados en el municipio a lo largo del pasado año, mientras que el 46% fueron rubricados por mujeres.
Esa fue la tónica general también en Crevillent y Santa Pola, tanto en el capítulo de temporalidad del empleo como en el de género.
En la comarca el perfil mayoritario del contratado es el de un hombre de entre 25 y 44 años que encontró un empleo temporal en el sector servicios.
Desde CCOO se considera que la reforma laboral del año 2012 “sigue estando muy presente en la situación de la precariedad” por lo que, a juicio del sindicato, “se pone de manifiesto que es necesario su reforma para dar un impulso para la generación de un empleo más estable”. Incide CCOO que la precariedad del mercado laboral agudiza la desigualdad.