La propia naturaleza, a través de las corrientes marinas, ha hecho su trabajo de forma rápida y eficaz en las últimas horas propiciando la reapertura al baño de Playa Lisa de Santa Pola, cerrada al mediodía de ayer al baño tras detectarse altas concentraciones de las bacterias E-coli y Enterococos, propias de aguas fecales, que desaconsejaban el acceso de los bañistas al interior del agua.
Solo 24 horas después de recibir el aviso por parte de la Generalitat Valenciana de la necesidad de clausurar al baño esa parte del litoral santapolero, este jueves se ha recibido la autorización de la Administración para reabrir la playa toda vez que las concentraciones de ambas bacterias se ha desparecido prácticamente por lo que el baño vuelve a ser apto.
Así lo ha confirmado a Onda Cero Elche el concejal de Playas en el Ayuntamiento de Santa Pola, Jorge Díez, que ha avanzado que “por precaución” se ha decidido mantener acordonado el acceso a Playa Lisa en la zona del canal que desemboca en la misma y por el que se cree que se produjo el vertido del agua con bacterias fecales como consecuencia de las intensas lluvias caídas a principios de semana.
El edil de Playas santapolero ha señalado además que los lavapiés de Gran Playa y Playa Tamarit, colindantes a Playa Lisa, van a permanecer inutilizables durante las próximas horas ya que, al nutrirse de agua del mar, se están vaciando y limpiando sus depósitos.
En el último análisis del agua practicado en Playa Lisa se han detectado 87 unidades de E-coli por 100 mililitros, frente a las 600 registradas en el análisis del pasado martes, y ya muy lejos incluso de los valores máximos permitidos para esa bacteria que son los 500 ufc/100ml.
Por lo que se refiere a la bacteria Enterococo, que era la más problemática por duplicarse en los análisis del martes los valores máximos permitidos (200 ufc/100ml), la reducción ha sido igualmente significativa hasta el punto que la última medición realizada ha arrojado el resultado de la presencia de tan solo 10 ufc/100ml.