La reacción del Instituto de Valenciano de Finanzas a las explicaciones que este viernes ha ofrecido desde el Martínez Valero el presidente del Elche CF, Diego García, no se ha hecho esperar. El máximo dirigente franjiverde mostraba su deseo de que el club se desjudialice para facilitar la gestión diaria de la entidad y mandaba la pelota al tejado del ente valenciano que dirige Manuel Illueca.
El IVF, sin embargo, no tiene previsto variar ni un ápice su hoja de ruta a pesar del mensaje lanzado por Diego García. De hecho, el banco público del Consell no retirará ninguna de las causas judiciales que mantiene abiertas con relación al Elche CF mientras que el Club no reciba una propuesta en firme para garantizar, vía aval bancario, el abono de la decisión de recuperación de dinero público dictada por la Comisión Europea y un plan de pagos creíble para garantizar la devolución de la deuda de la Fundación del Elche CF, que asciende a 15'9 millones de euros.
Cabe recordar que el IVF mantiene un recurso contra el convenio de acreedores del Elche CF porque, entre otras cosas, no está de acuerdo con la ampliación propuesta para capitalizar la deuda, un movimiento que diluiría su mayoría accionarial y disminuiría notablemente el valor del derecho de crédito que ostenta a su favor. Por su parte, la entidad franjiverde presentó una querella por cláusulas abusivas en el contrato de prenda incluido en los créditos concedidos por el Consell en 2011. La vista judicial está prevista para el 28 de noviembre en los juzgados de Elche.
Ante esta postura firme por parte del Banco del Consell no cabe duda de que la vista judicial del 28-N se mantendrá en la previa al inicio de la segunda subasta para la adjudicación de la deuda de la Fundación del Elche CF y, con ella, el derecho a controlar el 54'73% de las acciones de la entidad. Si las dos partes, IVF y Elche, no llegan a un punto de entendimiento podría repetirse la situación vivida con Skyline International si bien en este caso el Consejo de Administración tiene más urgencias ante la sombra de la sanción de Bruselas y el desfase presupuestario para este curso, que asciende a 1'8 millones de euros.