Tocó la semana buena. El Elche CF nos tiene acostumbrados a luces y sombras, pero ante la Peña Deportiva de Santa Eulalia pudimos ver algo de luz y, además, los resultados acompañaron para poner cinco puntos con respecto al quinto clasificado y quedarse a solo cuatro del Villarreal B, que ocupa la segunda plaza.
Y si hay alguien que encienda el interruptor para dar la luz en este equipo es Jony Ñiguez. El domingo cuajó un partido muy notable. Ganó duelos aéreos, dio continuidad a la posesión, muchas veces con pases verticales y superando líneas, y estuvo casi en cada segunda jugada para darle equilibrio al equipo. Esto último era un déficit del equipo en la primera vuelta. Su dinamismo con balón es algo muy positivo para un equipo que muchas veces se ahogaba en la salida de balón.
Y otro al que hay que destacar es Nino. El trabajo del capitán es incansable, ofreciendo siempre una opción más al poseedor de balón es magnífico. Hasta en la primera parte ofreció una solución a Jose Juan cuando quiso montar un contraataque rápido. Trabajó entre líneas y estiró al equipo cuando este lo necesitó.
Aún así, quedan cosas por mejorar. La pérdida de Neyder Lozano que pudo costar un gol en la segunda parte es un aspecto que la afición le pedía mejorar a Golobart. Y, por otro lado, Tekio debilitó al equipo en ataque con pases fallados y centros que acabaron en nada. Falta de solidez en algunos minutos de desconexión. Y en ataque me da la sensación de que el equipo abusa del recurso fácil del centro al área y hay muy poca productividad en ello.
En cualquier caso, la verticalidad de la jugada que precede al penalti con la doble ocasión de Benja y Nino es una nota muy positiva. Ahí es donde este equipo puede hacer daño.
Iván 'Pachu' Martínez