“Queda mucho, pero estoy segura de que lo vamos a conseguir”
Esther Menárguez Navarro, presidenta del Club Joventut d'Elx y empleada de Urbaser, resalta la igualdad de género que se vive en su club y en la empresa en la que trabaja
Es difícil destacar, tanto como merece, la figura de la mujer en la sociedad y en el trabajo. Su incorporación en tantos ámbitos de la vida, hace tan solo 30 años, era algo incomprensible para muchos.
La revolución de la mujer ha sido el hecho más importante de nuestro país durante décadas, abriendo las puertas a la educación y la independencia económica. Este fue el principal factor detonante que dio el paso al inicio de la igualdad, hoy bastante avanzado. Los grandes logros han venido de mano de las leyes de igualdad porque han sabido ofrecer el camino a hombres y mujeres, olvidando los géneros y subrayando a las personas como seres humanos iguales y capaces.
Aún la mujer no ha podido satisfacer con plenitud e igualdad los tres ámbitos más importantes de la vida: el familiar, el personal y el profesional. Todavía son más las mujeres, las amas de casa o cuidadora de niños, a las que juzgan su vida y su valía por ser mujer. Parece imposible romper ese techo de cristal en las empresas para tener las mismas oportunidades y que te valoren por tus conocimientos y aptitudes.
Por suerte, y gracias a la lucha constante de todos, hoy las mujeres nos representan en todos los ámbitos y sectores de la sociedad, pero aún no con la misma relevancia y respeto que han tenido hacia los hombres desde sus inicios. Es una lucha que no va a cesar. En los momentos donde estemos al final de este camino tan duro, habrá que ver si realmente los máximos responsables de nuestro país se atreven, por fin, a instaurar la igualdad con total plenitud, olvidándose de los géneros y premiando a las personas.
Desde mi experiencia, trabajo cada día con mujeres de grandes capacidades y éxitos, gracias a su esfuerzo y compromiso con la sociedad. Tengo la suerte de trabajar en una empresa (Urbaser), que respeta la igualdad de género, salarial, horaria y todo lo que se refiere al valor del trabajo sin distinciones. Además, utiliza su estructura y posición para dar visibilidad a la problemática y une sus fuerzas para conseguir la igualdad total entre hombres y mujeres.
Por otra parte, dirijo un club de fútbol sala (Joventut d’Elx), del que soy la presidenta. El equipo más representativo es femenino y está dirigido por una de las personas más importantes del deporte español, también mujer (Alicia Morell); pero también trabajo con grandes hombres y todos remamos en la misma dirección. Apostar por todo lo que se refiere a femenino en el deporte a día de hoy, puede parecer que es perder esfuerzos y dinero por desgracia, pero nos impulsa una lucha constante por la igualdad.
La mujer se forma, trabaja y se entrena duro para conseguir su máximo rendimiento y llevar al deporte español a lo más alto del mundo. Ahora se están viendo pinceladas por parte de las instituciones, dando importancia a las personas y no a los géneros. Por eso tenemos que avanzar más rápido, por ellas, por su valía, porque lo merecen.
Queda mucho por aprender, por compartir y por combatir, pero estoy segura de que lo vamos a conseguir.
Esther Menárguez Navarro es presidenta del Club Joventut d'Elx y empleada de Urbaser