Ingredientes:
500 gr de queso fesco
500 gr de nata líquida
100 gr de azúcar
6 hojas de gelatina o 15 gramos de gelatina en polvo
100 gr de galletas
50 gr de mantequilla
Mermelada de fresa o frutos del bosque
Elaboración:
Se ponen a remojo cuatro hojas de gelatina. En un cazo se pone al fuego la nata con el queso y el azucar. Sin parar de remover, cuando está a punto de hervir la mezcla, se añaden las hojas de gelatina escurridas, se remueve un poco más (sin que rompa a hervir) y se retira del fuego.
En la batidora o mezclador se trituran las galletas hasta que se quedan como harina y se mezcla con la mantequilla derretida. Se forra la base de un molde con esa masa y se vierte encima la mecla anterior. Se mete en la nevera mínimo seis horas aunque se puede hacer de un dia para otro.
Por último cuando ya haya pasado ese tiempo se pone en un cazo la mermelada. Cuando esté a punto de hervir se añaden dos hojas de gelatina escurridas (previamente las habremos puesto unos minutos a remojo). Se cubre con esa mezcla la tarta y se vuelve a dejar en la nevera al menos otras dos horas aunque se aconseja que la última media hora esté en el congelador.