El motivo para que ese ahorro de combustible sea tan bajo es que para que funcione el aire acondicionado de los autobuses y otros accesorios de los mismos es necesario disponer de la combustión tradicional.
Este año, la empresa Autobuses Urbanos, concesionaria del transporte público urbano, va a adquirir seis nuevos vehículos. Todos estarán alimentados por el combustible habitual, descartándose la llegada de unidades híbridas hasta que no sean realmente eficaces en ahorro y en preservación del medioambiente.
Incremento de pasajeros
La edil de Movilidad Urbana, Esther Díez, ha confirmado este jueves que el número de pasajeros en el transporte público urbano creció el pasado año en un 1’5%, alcanzando los 11’4 millones de pasajeros.
La principal subida de viajeros se ha producido en la línea K, con un aumento del 9’3% respecto 2015; seguida de la línea L, que ha experimentado una subida del 5%, y de la línea B, con un incremento del 3’3%.
Díez ha señalado que “un 65’8%” de los pasajeros disfrutaron de la gratuidad del servicios.
La Concejalía de Movilidad ha impulsado una campaña de concienciación sobre los beneficios del uso del transporte público, que consiste en aplicar a determinadas marquesinas y mupis de la ciudad un filtro gris con el que se simula de qué color se vería Elche si toda la ciudadanía utilizara el coche y se realiza una proyección del número de vehículos que habría en el municipio si se siguiera la tendencia actual.