Jarro de agua fría para los agricultores que ven afectadas su planificación hídricas

El Gobierno central deja por segundo mes consecutivo al Camp d’Elx sin trasvase desde el Tajo

Esta mañana la Comisión Central de Explotación del Acueducto sugería un trasvase de 19,6 hectómetros cúbicos para abastecimiento y regadío pero la ministra para la Transición Ecológica ha desoído el dictamen y lo limita a 7,5 hectómetros para consumo urbano

David Alberola García

Elche |

Embalse de Crevillent en el que se almacena el agua procedente del trasvase Tajo-Segura | Onda Cero Elche

Por segundo mes consecutivo, el Ministerio para la Transición Ecológica ha dejado la cuenca del Segura sin trasvase desde el Tajo pese a que la Comisión Central de Explotación del Acueducto, integrada por técnicos,ha emitido por la mañana un dictamen técnica de recomendando un trasvase de 19,6 hectómetros cúbicos de agua tanto para regadío como para abastecimiento urbano.

Se ha repetido la situación vivida en noviembre y de nuevo la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha optado por desoír de nuevo el criterio técnico y limitar la autorización de trasvase a abastecimiento.

Así, el ministerio ha anunciado que se trasvasar 7,5 hectómetros cúbicos de agua para consumo humano.

El regadío ha vuelto con ello a recibir un varapalo, por segundo mes consecutivo, y en la provincia de Alicante los en torno a 22.000 comuneros de Riegos de Levante, entidad que se nutre del agua procedente de la cuenca del Tajo, ven perjudicadas sus planificaciones hídricas.

A tenor del agua embalsada en la cabecera del Tajo, el Memorándum del trasvase fija la existencia de un Nivel III lo que deja la autorización del trasvase a voluntad del Ministerio para la Transición Ecológica, cuya titular en esta ocasión ha optado de nuevo por una decisión que afecta negativamente a los agricultores de Elche y de la provincia de Alicante.

Según el comunicado público difundido por el ministerio, en la decisión adoptada “también se ha atendido al hecho de que una de las mayores presiones al Mar Menor es la de la contaminación difusa procedente del regadío en el Campo de Cartagena". En ese sentido, asegura el Gobierno, la gestión de la cuenca hidrográfica del Segura "debe valorarse en su conjunto, tomando en consideración las diferentes situaciones y circunstancias que concurren en cada momento".

"Resulta necesario tener en cuenta el estado ambiental del Mar Menor y los esfuerzos que, directa o indirectamente, realizan las Administraciones Públicas para revertir su mala situación", concluye el comunicado.