Una treintena de entidades agrarias de la Comunitat Valenciana, Región de Murcia y Almería han firmado un manifiesto en que el reclaman al Gobierno central “que deje de poner en riesgo” el “presente y futuro” del sector primario en esas zonas. Insisten en que todos los agricultores de esas áreas geográficas, que se nutren del trasvase Tajo-Segura, han hecho “los deberes” que el Estado les encargó a modo de modernización de regadíos e incremento de la eficiencia de todas sus redes de riego y critican que ahora se vaya a traspasar una “línea roja” con el plan hidrológico del Rajo que se va a aprobar y en el que no se ha tenido en cuenta ninguna de las alegaciones presentadas por desde el Levante español.
Con ello, el Plan Hidrológico del Tajo que el Gobierno central está decidido a aprobar contempla la reducción en el 50% de los aportes que actualmente llegan a la cuenca del río Segura procedente de la del Tajo.
Los colectivos de regantes destacan que con el planteamiento del Ministerio de Transición Ecológica van a dejar de llegar 105 millones de metros cúbicos de agua al año lo que afecta “al conjunto del regadío” de las explotaciones agrarias que se nutren del Tajo-Segura.
El comunicado apunta que “todas las dotaciones” se verán reducidas, poniendo en riesgo miles de empleos.
Entre los firmantes del manifiesto están el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, la Federación Nacional de Comunidades de Regantes de España, la Federación de Comunidades de Regantes de la Comunitat Valenciana, ASAJA Alicante, la Junta Central de Usuarios Regantes del Segura, la Junta Central de Usuarios del Vinalopó, L’Alacantí y Consorcio de Aguas de la Marina Baja.