Profesionales sanitarios de los departamentos de saludElche-Hospital General y de Torrevieja han colaborado en un estudio en torno a la soledad no deseada de las personas de la tercera edad y su impacto en el sistema sanitario.
En el marco de ese trabajo se ha elaborado un mapa de recursos existentes en Elche y Torrevieja que ayuda a las que las personas mayores mantengan su salud.
El estudio se ha denominado ‘La soledad que duele’ y ha estado gestionado por la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la ComunitatValenciana (Fisabio).
El trabajo ha estado liderado por Rosi Cuadrado, enfermera del centro de salud de Altabix de Elche, que ha explicado que la iniciativa “nace de la inquietud de un equipo de enfermeras y una trabajadora social sanitaria preocupadas por el malestar que sienten algunas de las personas mayores que viven solas sin desearlo”.
Para la realización del análisis, que se ha llevado a cabo a lo largo de dos años, se dividió a los participantes en el mismo en dos grupos. Por un lado, los que son altamente frecuentadores y los que no lo son, según el criterio de más de 16 visitas anuales a servicios de Atención Primaria, excluyendo a pacientes de nivel tres de cronicidad.
Los datos recogidos incluyen variables sociodemográficas, fenómenos de la esfera mental y apoyo social, evaluados a través de instrumentos reconocidos como la Escala de Soledad ESTE II, que valora la soledad social; la Escala de Autoestima de Rosenberg; el Cuestionario Duke-UNC para apoyo social percibido; y la Escala de ValoraciónSociofamiliar TSO para valorar la situación social.
El estudio ha arrojado diferentes resultados de interés para el ámbito profesional sanitario y comunitario. Además, abre la vía a nuevos estudios y acciones.
Además, evidencia la relación entre la hiperfrecuentación de servicios sanitarios y varios factores de salud mental y apoyo social en personas mayores que viven solas. La soledad y la baja autoestima destacan como factores que si se abordan mediante intervenciones comunitarias y psicosociales, podrían reducir la carga en los servicios de salud.
Mapa de activos
Parte de la investigación se ha centrado en la creación de herramientas para las personas mayores que incrementen su bienestar. En este sentido se ha elaborado un mapa de activos.
Alexandra Martínez, enfermera del centro de salud de Altabix, ha señalado que llevar a cabo ese mapa y su enfoque a la población mayor de 65 años, “se han empleado diferentes técnicas, contempladas en el trabajo de tipo comunitario que se realiza en Atención Primaria, como paseos para localizar recursos y valorar posibles activos, entrevistas, búsqueda bibliográfica en internet y dinámicas participativas en grupo con diferentes grupos estratégicos de la comunidad tales como pacientes mayores, miembros del tejido asociativo local y delegados de barrio”.
Por otro lado, Rosi Cuadrado ha apuntado que “para identificar activos entre los recursos que les presentamos usamos una dinámica participativa de la guía XarxaSalut de laComunitat Valenciana en la que cada persona identificaba los recursos de los que hace uso personalmente, su familia o amistades, colocándolos en un mapa de nuestra zona básica para después realizar una puesta en común con el objetivo de que todo grupo los conociese”.
"Como profesionales y como sociedad estamos obligados a favorecer una vida digna y de calidad también en esta etapa del ciclo vital. Es por ello que estamos satisfechas con el proyecto emprendido y con la experiencia que hemos vivido gracias a todas las personas que han participado", han concluido las enfermeras del centro de salud de Altabix.
En la investigación también han participado la trabajadora social sanitaria de Atención Primaria del departamento de salud de Torrevieja María Desireé Paredes, la enfermera de Atención Primaria del departamento de salud de Torrevieja María José Montesino, la enfermera de Atención Primaria del departamento de salud de Torrevieja Raquel Berna y el bioestadístico del Hospital General Universitario de Elche Alejandro Moya.