Con el traslado a un vivero de muy buena parte del arbolado del barrio Porfirio Pascual de Elche (en torno al 80 %, ha dicho el alcalde ilicitano), este viernes han comenzado las obras de renovación urbana de ese barrio, que es una actuación que cuenta con un presupuesto de más de 14 millones millones de euros, que tiene una subvención de fondos europeos Next Generation.
Por ello, para no perder esa aportación europea, los trabajos tienen que estar finalizados en verano de este próximo año 2026.
Se van a rehabilitar los 18 bloques que hay en el barrio en una actuación que afecta a 300 vecinos y que conlleva también la reurbanización urbana de Porfirio Pascual.
Se ha proyectado reforzar el aislamiento de las fachadas, la sustitución de las carpinterías exteriores actuales y la instalación del doble acristalamiento, así como la colocación de ascensores en los edificios y la implantación de placas solares fotovoltaicas en las cubiertas de los inmuebles para contribuir a la generación de agua caliente sanitaria.
Por otra parte, se llevará a cabo la eliminación de los daños estructurales producidos por la presencia de humedades, la centralización de los contadores de agua y electricidad en zaguanes o la sustitución de bajantes de saneamiento y pluviales, con la eliminación del fibrocemento existente. También se va a renovar la iluminación.
El alcalde de Elche Pablo Ruz ha puesto en valor que la renovación urbana de Porfirio Pascual es un proyecto que se ejecuta con la colaboración público-privada.
Las familias residentes en el barrio ilicitano Porfirio Pascual que presenta un alto nivel de vulnerabilidad tendrán ayudas hasta el punto de que no tendrán que realizar aportaciones económicas, mientras que en el resto de casos, incluidos los locales comerciales, realizarán desembolsos que se moverán entre los 5.000 y 7.000 euros, en función de determinados condicionantes.
Por su parte, el Ayuntamiento de Elche aportará unos dos millones de euros.