Ya están en marcha las obras de consolidación de la ladera del río Vinalopó a su paso por Elche en el entorno en el que está emplazado el Molí del Real. El objetivo de los trabajos es el de dar una solución definitiva a los problemas de desplazamiento de tierras que se han registrado en la zona y que pone en riesgo la estabilidad del emblemático edificio.
El proyecto, que tiene un presupuesto de 264.800 euros, se lleva a cabo tras la elaboración de un estudio geotécnico para conocer las causas del deterioro de la zona, que concluyó que las grietas aparecidas en el terreno se debían a varios factores, que van desde un exceso de agua ocasionado por las filtraciones a lo largo del tiempo, por una posible fuga de agua de la Acequia Mayor a movimientos en el muro de mampostería y la erosión del talud.
Con ello, los trabajos se están centrando en la impermeabilización de la acequia para evitar las posibles fugas que pudiera tener, en la ejecución del tacón de escollera cuyo fin es estabilizar el muro y en la construcción de dos terraplenes de cinco metros a cada lado para proteger el talud y que no vuelva a ceder.