El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha instalado en el Ayuntamiento de Crevillent un acelerógrafo que mide la aceleración o movimiento del suelo.
Ese dispositivo va a permitir mejorar la capacidad de evaluar los daños de los terremotos y conocer la sismicidad de la zona, así como contar con mapas de sacudidas del suelo.
El IGN ha elegido la localidad de la comarca del Baix Vinalopó para la instalación de ese aparato porque el municipio está situado entre dos fallas tectónicas.
Con la implantación de ese dispositivo, la localidad se incorpora a la red nacional de acelerógrafos, que cuenta con 70 equipos distribuidos en todo el país y con cinco en la Comunitat Valenciana (Valencia, Xativa, Ontinyent y Crevillent).
Ese sistema está activo las 24 horas del día, durante los 365 días del año, monitorizando los datos y transmitiéndolos en tiempo real a la Red Sísmica Nacional de España.