El grupo municipal del PP en el Ayuntamiento de Crevillent lleva al pleno municipal de este mes, cuya celebración se ha fijado para este martes, una moción en la que solicita “la paralización del nuevo impuesto de residuos que quiere implantar el Gobierno de España”, que, según insiste el Grupo Popular, “fija que a partir del 1 de enero de 2022 entrará en vigor una nueva penalización de 30 euros por tonelada del residuo que va a un vertedero”.
También va a solicitar que tanto a nivel nacional como a nivel autonómico, las administraciones creen una partida económica extraordinaria, destinada a acometer inversiones de calado en las plantas de tratamientos de residuos existentes, para la mejora de los procesos de gestión actuales.
Según ha explicado Miguel Ángel Sánchez, portavoz del grupo municipal del PP crevillentino, el cálculo de la aplicación de ese nuevo impuesto a los consorcios de residuos, conformados por los todos los ayuntamientos, repercutirá directamente en los mismos y en concreto a Crevillent le supondrá un aumento estimado de 207.600 euros por año, por el tratamiento de sus residuos.