De la pedanía de Torrellano

Detenido padre e hijo que usaban una pizzería de Elche para vender droga

Tenían cocaína en botes que daban la apariencia de ser harina

David Alberola García

Elche | 29.11.2023 14:05

Parte del dinero intervenido a los detenidos en la pedanía de Torrellano de Elche.
Parte del dinero intervenido a los detenidos en la pedanía de Torrellano de Elche. | Policía Nacional

La Policía Nacional ha detenido a un padre y su hijo por vender droga desde una pizzería de su propiedad emplazada en la pedanía de Torrellano. Allí los agentes descubrieron la cocaína en botes que daban la apariencia de ser harina.

Durante la investigación se han practicado tres registros en domicilios de Elche y Santa Pola, además de en la pizzería, en los que se han intervenido 55 gramos de cocaína, 400 gramos de hachís, básculas de precisión y 40.000 euros en efectivo, así como, un vehículo que figuraba como sustraído en Francia, relacionado también con el tráfico de drogas.

Los detenidos, que tienen 51 y 24 años de edad, están acusados también de dedicarse a la distribución de cocaína y hachís por toda la zona de Torrellano y Elche.

La investigación ha sido llevada a cabo por agentes del Grupo I de Crimen Organizado de la Brigada de Policía Judicial y según ha constatado la misma los compradores llegaban a la pizzería y tras contactar con los arrestados les hacían entrega de dinero a cambio de la droga.

La distribución y venta de sustancias estupefacientes en las que se utilice la explotación de un negocio aporta un agravante al bien jurídico ya que pone al alcance del consumidor una mayor facilidad de acceso a la droga y permite al vendedor aprovecharse de las condiciones del establecimiento, favoreciendo los intercambios de drogas, bajo la apariencia de meras personas que se acercan, en este caso investigado, a hacer un encargo o recoger una pizza bajo una apariencia legal.

La Policía Nacional ha incidido que la pizzería regentada por los arrestados era “un negocio idóneo para el blanqueo de capitales ya que había un flujo constante de dinero en efectivo ideal para encubrir el origen de los beneficios obtenidos ilícitamente, de forma que pareciera legal, siendo un componente esencial del tráfico de drogas”.