La Policía Nacional ha detenido en Elche a una pareja que está acusada de apropiarse de 120.000 euros de una asociación en la que la mujer arrestada era su contable.
Los agentes del Grupo de Delincuencia Económica de la Comisaría Provincial de Alicante, que han sido los que han llevado a cabo la investigación, han constatado que el hombre detenido recibió en su cuenta bancaria hasta 257 transferencias por valor de 90.000 euros, y la mujer recibió en su cuenta bancaria otros 30.000 a través de 135 transferencias.
La entidad víctima de esa apropiación indebida trabaja por la inserción laboral de personas en riesgo de exclusión social, en toda la provincia de Alicante, ofreciendo formación en confección textil industrial junto a un acompañamiento social, realizando así una intervención integral e individualizada de la persona gracias a su equipo interdisciplinar.
La apropiación de tal cantidad de dinero dejó a la asociación en una grave situación de falta de liquidez por lo que tuvo que cesar temporalmente el desarrollo de su actividad y dejar de dar apoyo a decenas de mujeres.
Los detenidos son una mujer y un hombre de 42 y 44 años de edad respectivamente. Ambos son de nacionalidad española y han sido puesto a disposición judicial.
La investigación se inició a raíz de la denuncia presentada por la presidenta de la asociación que detectó dos pagos en concepto de alquiler del piso de acogida de la asociación cuyo importe no había ido a parar a la cuenta bancaria del proveedor que estaba gestionando hasta el momento el piso, sino a otra diferente. Además, según la denuncia, otro proveedor de servicios de la asociación comunicó que tenía tres facturas pendientes de cobrar por un importe de 1540 euros. Cuando la presidenta preguntó a la contable de la asociación sobre estos pagos esta última mostró a la presidenta tres correos electrónicos en los que el destinatario supuestamente confirmaba haber recibido el dinero.
Debido a las sospechas que la presidenta de la asociación tenía sobre la contable, y viendo esta última que podía ser descubierta por los actos ilícitos cometidos, se dio de baja laboral y apagó el teléfono para no ser localizada. Ante esta actitud, la presidenta de la asociación hizo una revisión de las cuentas de las últimas semanas descubriendo que había una serie de irregularidades en múltiples pagos.