Un reventón cálido puso en jaque durante este martes a las localidades alicantinas de Villena y Pinoso, y a la manchega de Caudete. Un fenómeno meteorológico poco común provocado por las altas temperaturas y la condensación rápida de agua entre capas que ha arrancado de cuajo árboles enormes debido a unas rachas de viento con una velocidad por encima de los 90 kilómetros por hora y unas temperaturas por encima de los 40 grados.
Roberto Brasero ha explicado, en el programa Espejo Público de Antena 3, que lo reventones cálidos "son los más curiosos" y se pueden dar en estas fechas veraniegas: "Son unas tormentas muy fuertes que se producen con intensidad. Lo que cae no es agua. La base de la tormenta está muy alta y descargara el agua, pero entre las capas queda mucho calor como consecuencia de las elevadas temperaturas de estos días". "El agua se evapora directamente y al evaporarse se acelera el aire y el viento coge fuerza a medida que va cayendo al suelo, con fuertes rachas capaces de derribar árboles con fuerza", ha detallado Brasero.
Fulgencio Cerdán, alcalde de Villena, se ha hecho eco de lo sucedido en su localidad y que provocó el caos entre los vecinos: "Las altas temperaturas del día dieron paso a un reventón térmico durante la tarde que ocasionaron fuertes rachas de viento en Villena, llegando a superar en algunos puntos del municipio los cien kilómetros por hora. Estas fuertes rachas ocasionaron la caída de varios árboles, principalmente entre la zona del Morrón y las Casas de Cabanes, y también provocó la rotura de algunas ramas en diferentes ubicaciones de Villena".
Por desgracia, este reventón cálido coincidió en el tiempo con un incendio que, afortunadamente, fue rápidamente sofocado en la zona del Zaricejo. "Desde el primer instante, varios concejales del Ayuntamiento de Villena nos desplazamos para valorar la situación y activar un dispositivo de seguridad y control de daños. Diferentes efectivos ya realizan trabajos para la recuperación de los espacios", ha señalado el alcalde.
Fulgencio Cerdán ha agradecido la labor de la Policía Local de Villena y de la Guardia Civil, Bomberos, Brigadas de Jardinería y Limpieza, Protección Civil Villena y Talleres de Empleo, entre otros. Por suerte, no ha habido que lamentar daños personales ni humanos.
