El Elche se ha hecho con los derechos económicos de Lucas Boyé y el jugador pasará a ser propiedad del club franjiverde a partir de la próxima temporada. El delantero argentino ha sido el futbolista más rentable de los que llegaron para esta campaña y Christian Bragarnik no ha dejado la oportunidad de echarle el lazo para afrontar el reto deportivo del curso que viene, a cambio de su pase por cerca de 1,8 millones de euros.
Boyé, que pertenece al Torino hasta el 30 de junio, ha marcado siete goles en competición oficial (seis en Liga y uno en Copa) y pese a ser un fichaje cuestionado por el rendimiento ofrecido en Europa, ha terminando acallando las críticas y demostrando su buen nivel en el terreno de juego. En estos momentos pasa por ser un jugador cotizado en el mercado y seguro que tendrá muchas ofertas a final de temporada.
Bragarnik ha explicado este jueves, en su primera rueda de prensa, que "dada la buena salud económica del Elche, se ha decidido comprar en propiedad a uno de los jugadores que mejor ha rendido". "El Elche no tiene deudas ni problemas económicos y su intención es armar un proyecto competitivo", ha insistido.
Sobre la opción de seguir o no en caso de confirmarse el probable descenso a Segunda, el empresario argentino ha dicho que "eso también depende mucho de los jugadores y él ahora está integrado y muy a gusto". "La gente piensa que las entradas y salidas dependen solo de la propiedad, pero hay jugadores que luego exigen su marcha y presionan. Siempre priorizaremos la salud económica del club y las decisiones que se tomen serán pensando en eso y en el objetivo deportivo", ha señalado.