Este jueves se han cumplido 110 años de la inauguración del Puente de Canalejas o Pont Nou de Elche, que aún hoy en día luce con todo esplendor en una ciudad separada por el río Vinalopó en la que los ocho puentes con los que cuenta juegan diariamente un papel determinante en las comunicaciones.
La ciudad cuenta con el Pont del Bimil.lenari, el Puente del Ferrocarril, el Puente de Altamira, la Pasarela del Mercado, el Puente de Canalejas, el Puente de Santa Teresa, el Puente de la Generalitat y el Puente de la Ronda Sur.
El Pont Nou fue inaugurado el 20 de abril de 1913 tras más de un año de obras.
En este momento, se convirtió en el primer puente ejecutado en Elche con hormigón armado y en el primero de España con un sólo arco de cemento armado, formado por un tramo central abovedado de 50 metros y dos tramos laterales rectos.
De hecho, según se destaca desde la Cátedra Pere Ibarra de la Universidad Miguel Hernández (UHM) de Elche, el Pont Nou o Puente de Canalejas “colocó” a la ciudad ilicitana “en la historia de la mejor tradición de la ingeniería civil española”.
Desde la propia Cátedra se revela que en aquel año del inicio de la segunda década del siglo XX, el nuevo puente pasó a formar parte de la travesía urbana de Elche de la carretera Alicante-Murcia. Entonces, sobre el río Vinalopó sólo existía un puente, el de Santa Teresa (conocido popularmente como el de la Virgen), que además exigía un giro de la vía desde la Plaça de Baix por la margen del río para alcanzar ese antiguo puente.
La creación del Puente de Canalejas evitaba ese giro, dando continuidad a la alineación de la plaza al mismo tiempo que creaba un eje de crecimiento urbano en la margen derecha del río.
