El Elche CF, lejos de mejorar, sigue agravando su situación clasificatoria en Primera División. Tras la disputa de la 16ª jornada de LaLiga, el equipo ilicitano se mantiene colista con sólo cuatro puntos sumados de los 48 disputados. La primera victoria continúa resistiéndose y después del varapalo sufrido ante el Celta de Vigo, uno de sus rivales directos, la salvación se ha alejado a once puntos.
El conjunto dirigido por Pablo Machín suma once partidos seguidos en el farolillo rojo de la clasificación y la diferencia con la permanencia es la más amplia que ha tenido que afrontar hasta el momento. Sus números convierten en una misión casi imposible la remontada dado que a falta de 22 jornadas y 66 puntos por disputarse, el Elche debería sumar la mitad o más para poder mantenerse. El año pasado, el Getafe precisó de 39 puntos en una liga en la que a estas alturas el colista Levante sumaba ocho puntos y la salvación se encontraba en 14 puntos.
Pablo Machín se estrenó con victoria en la segunda eliminatoria de la Copa del Rey ante el Guadalajara (0-3), pero desde entonces ha encadenado tres derrotas seguidas: Atlético de Madrid (2-0), Ceuta (1-0) y Celta de Vigo (0-1). En ninguno de los tres encuentros ha logrado ver portería y sí se ha mostrado como un equipo débil desde el punto de vista defensivo.
Ante esta panorama, al Elche sólo le queda apelar al honor de sus profesionales, para que no se dejen llevar durante lo que resta de temporada, y apelar a un milagro para que la situación cambie tanto como para poder soñar con la permanencia. En juego no sólo está perder la categoría, algo que puede entrar en las quinielas para un equipo como el Elche, sino vaciar las gradas del estadio con una afición que el otro día volvió a demostrar que está por encima de todo, con 20.121 espectadores pese a la situación que vive su club.