Hay competiciones que van más allá de la resistencia y de la preparación. Carreras que suman al esfuerzo una tremenda capacidad de superación física y mental. De otra manera, es imposible estar durante 167 kilómetros corriendo, como ha sido capaz de hacerlo la deportista ilicitana Laura Irina Lara Sánchez.
El escenario fue la durísima carrera Ultramediterránea, una prueba de ultrafondo de 100 millas de recorrido (167 kilómetros) y que coronó a la de Elche como vencedora en categoría femenina tras pasar la línea de meta con un tiempo de 29 horas y 44 minutos. La carrera comenzó en Alcoy y finalizó en Beniatjar, pasando por Serrella, Aitana, Benicadell o Montcabrer.
Para ello, Laura Irina, profesora de Inglés en el instituto Misteri d'Elx, tuvo que estar un día y seis horas "corriendo, comiendo cada 45 minutos, y sin dormir". "Después de la carrera me duelen zonas que nunca había sentido, con un gran cansancio, pero con una enorme satisfacción por el logro conseguido", ha explicado esta deportista ilicitana que reconoce que no hace mucho comenzó a competir tras un problema de salud que sufrió su padre: "Empecé a correr para ayudar a mi padre a ponerse en forma tras un infarto".
