Un equipo de científicos del Instituto de Neurociencias de la Universidad Miguel Hernández (UMH) de Elche, que es centro mixto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) ha identificado una estrategia para reducir el avance de las metástasis cerebrales, que son una de las complicaciones más graves del melanoma, el tipo de cáncer de piel más agresivo, y que podría mejorar la respuesta a los tratamientos actuales.
El estudio está liderado por la científica Berta Sánchez-Laorden , siendo su primer autor el investigador Francisco Javier Rodríguez. En modelos preclínicos de ratón, ha demostrado que la microglía, que es un tipo de célula inmune del cerebro, puede manipularse para frenar el crecimiento de las metástasis cerebrales y mejorar la respuesta a inmunoterapia.
Con ello, esa célula se puede reprogramar para pasar de un estado que favorece el crecimiento tumoral a otro que potencia la respuesta antitumoral. Esto supone que la microglía podría utilizarse en combinación con inmunoterapias existentes para potenciar su eficacia en pacientes con metástasis cerebrales.
Los resultados de la investigación han sido publicados en la prestigiosa revista ‘Cancer Cell’ y, según destacan los investigadores, suponen "un logro importante" en la comprensión de las interacciones entre el sistema inmune cerebral y las metástasis en ese órgano, ofreciendo "una prometedora vía” para avanzar en la mejora del “pronóstico de los pacientes con cáncer avanzado".
Además, la estrategia identificada puede llegar a allanar el camino hacia nuevas estrategias terapéuticas para pacientes con melanoma y otros tipos de cáncer que metastatizan al cerebro, como son el tumor de mama o pulmón. "Este es sólo el primer paso; ahora nuestro objetivo es explorar más a fondo cómo se puede trasladar este conocimiento a tratamientos clínicos", ha señalado Francisco Javier Rodríguez.
El equipo ha contado con la colaboración del laboratorio Plasticidad Celular y Neuropatología del Instituto de Neurociencias, dirigido por el investigador José López-Atalaya, experto en microglía y análisis de datos de secuenciación, y del equipo de la catedrática Gema Moreno Bueno, del Instituto de Investigaciones Biomédicas Sols-Morreale y de la Fundación MD Anderson, que facilitaron las muestras de pacientes.
Este trabajo ha sido posible gracias a la financiación de la Melanoma Research Alliance, la Fundación FERO, la Agencia Estatal de Investigación del Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, y el Instituto de Salud.
