La Guardia Civil ha llevado a cabo una operación contra la falsificación y el contrabando de 1900 pilas falsificadas de una marca japonesa en Crevillent. En la operación realizaron seis inspecciones en establecimientos de sociedades mercantiles dedicadas a la importación y, por ello, la empresa podría enfrentarse al cierre del local y a una multa de 1.750.000 euros.
El pasado 18 de julio la Guardia Civil dio inicio a una operación realizando diversos registros en las empresas investigadas, todos ellos en Crevillent. De estas actuaciones se intervinieron 1961 pilas supuestamente falsificadas, dispuestas para su venta directa, siendo posteriormente retiradas del mercado.
La Guardia Civil ha recordado que la adquisición de este tipo de productos representa un riesgo para la salud de los consumidores. Esto último se debe a que se fabrican con metales pesados como plomo, cadmio o mercurio y que, al ser falsificaciones, no hay ningún tipo de control de calidad en su fabricación.
