Kiko Martínez vuelve a recuperar la sonrisa. Lo hace unos días después de haber vuelto a celebrar una victoria dentro del cuadrilátero. El sábado arrolló en el ring a Jordan Gill, campeón de Europa EBU, en apenas cuatro asaltos. Sin darle la oportunidad de sostenerse en pie, sometiéndole una y otra vez a base de golpes, con la derecha y con la izquierda, por arriba y por abajo. A lo Kiko. Fue 'La Sensación' de siempre, la que describe a uno de los mejores boxeadores de la historia.
Ahora Kiko sonríe el tiempo justo hasta que se le pregunta por su próximo reto, el siguiente que tiene entre ceja y ceja: boxear ante el inglés Leigh Wood (26 victorias, 16 por KO), de 34 años y actual campeón de peso Pluma por la WBA. El reto no tardó en llegar y nada más alzar los puños ante Jordan Gill, Kiko se fue a las cuerdas para dirigirse desde el cuadrilátero a Wood. Le señaló con su puño derecho y le dedicó varios gestos como clara provocación para que haya pelea entre ambos.
El inglés contestó a ese reto calificando a Kiko de no ser caballeroso. Para el de Torrellano, esa palabra "le queda grande tanto a su gente como a él; ha estado riéndose de mí, quizá por su ego o su manera de ser, y me ha ofendido; ha llegado el momento de que nos veamos". "Le tengo ganas porque me ha estado faltando al respeto constantemente, durante mucho tiempo. Seguro que esa pelea va a ser una buena batalla, una guerra", afirma desde su residencia familiar en Elche, donde va a descansar junto a su mujer y sus dos hijas durante estos días antes de volver a la carga.
Kiko Martínez ahora ya no se atreve a hablar de un último combate. A sus 36 años, su discurso ha variado ligeramente: "A mi edad tengo que pensar en ir pelea a pelea. Todo puede cambiar de un día para otro. De momento me encuentro bien y con mi nuevo equipo de Gabi Sarmiento he vuelto a recuperar la confianza en mí mismo. No sé si me quedará uno o dos combates, en este momento sólo queda esperar a que los equipos negocien".
Su próxima 'batalla' apunta a Estados Unidos. "Ese es mi destino", afirma Kiko, que tampoco renuncia a combatir en el Reino Unido ni ante cualquier rival, llámese Josh Warrington, campeón IBF; Leigh Wood, campeón WBA; o incluso Mauricio Lara. El 'Bronco' es otra figura emergente del boxeo mexicano que ya se ha postulado como aspirante a los títulos de Wood y Warrington, y a confirmarse como aspirante si para ello tiene que enfrentarse a los guantes de 8 onzas del gran Kiko Martínez.