A menos de una semana para que comience la Liga, el Elche sigue buscando los centrocampistas y delanteros que den por cerrada la plantilla de Fran Escribá. Para el mediocentro, el club tiene centrada su mirada en Manu Morlanes, cuya salida depende del Villarreal. Y para el ataque, el nombre de Darío Benedetto sigue sonando a pesar de las numerosas ofertas que mantiene sobre la mesa.
Christian Bragarnik está siendo el encargado de manejar este asunto en primera persona. El delantero argentino es su socio en Score Club 2019, sociedad que ostenta la propiedad del Elche, pero además es su representante. Barajó la oferta del Sao Paulo y ahora suena con fuerza el interés del Real Betis.
La llegada de Benedetto al Elche, procedente del Olympique de Marsella, sólo podría darse si el conjunto ilicitano es capaz de encontrar destino para Guido Carrillo. El atacante argentino, ya recuperado de la pequeña molestia muscular que le obligó a no jugar el Festa d’Elx ante el Levante, tiene cartel en Sudamérica y varios equipos estarían dispuestos a pujar por sus servicios. Guido, sin embargo, es feliz en el Elche y en caso de salir le gustaría seguir en la Liga o en Europa.
Además de la posible caja que podría hacer el conjunto ilicitano, también juega un papel esencial liberar su ficha, una de las más altas de la plantilla. Para Bragarnik no está siendo fácil esta operación y sigue moviendo fichas en el tablero con estas dos piezas. El club, mientras tanto, sigue madurando diferentes opciones en el mercado y sabe que para los partidos oficiales del mes de agosto cuenta con Lucas Boyé, Pere Milla y Guido Carrillo. Tres buenos atacantes que, no obstante, necesitan competencia para una liga tan larga como esta.