Lucas Boyé estará este lunes en el Martínez Valero, siguiendo el plan previsto en el inicio de la semana de trabajo del Elche. El futbolista argentino continúa en la ciudad y hasta que no se cierre todo no viajará a su próximo destino, que apunta a ser Granada. Queda la duda de si acudirá al estadio para despedirse o para vestirse de corto. En las últimas horas, Valencia y Olympiacos han vuelto a preguntar por el futbolista, aunque el Elche ya ha traslado cuál es su posición ante este posible traspaso.
La operación, en este punto (domingo, 22:15 horas) todavía no está cerrada y el Elche se mantiene inflexible con su última postura, con la oferta confirmada por Onda Cero este domingo al mediodía: siete millones de euros de traspaso fijo, más dos por objetivos en función de partidos, goles y permanencia del Granada y una cláusula de venta, en cualquier momento, si llega una oferta de diez millones de euros. En ese caso, los andaluces tendrían que pagar al Elche otros tres millones para quedarse el 100% de la propiedad del jugador o bien aceptar la recompra por parte del Elche para ejecutar esta operación.
El Elche mantiene la calma porque en ningún momento ha sido el que ha puesto a Lucas Boyé en el mercado. Sin embargo, sí ha atentado a la petición del delantero después de su impecable comportamiento en el equipo durante tres temporadas, aceptando que en dos ocasiones anteriores se le cerrara la puerta de salida del equipo para irse, principalmente, al Sevilla.
Ahora Boyé entiende que jugar en Segunda le aleja de su sueño de volver a la selección de Argentina y de competir en el máximo nivel del fútbol español. Así se lo ha comunicado al propietario Christian Bragarnik, al técnico Sebastián Beccacece y al director deportivo Sergio Mantecón, que es quien está gestionando en primera persona la negociación con quien fuera su compañero en la secretaría técnica del Elche, Nico Rodríguez. Este lunes será clave para avanzar en el traspaso de Boyé al Granada.