La lesión de Lucas Boyé preocupa en el Elche. Los gestos de dolor del delantero argentino y el hecho de que pidiera el cambio al cuarto de hora de encuentro ante el Athletic Club no hacen ser optimistas ante su inminente recuperación. El jugador ha estado tratándose con los servicios médicos del club y este martes se ha sometido a nuevas pruebas para determinar el alcance exacto de su lesión. Como mínimo, tendrá que estar un mes de baja.
Lucas Boyé no podrá volver a jugar hasta el mes que viene. Y su participación en las últimas cinco jornadas de Liga va a depender de cómo evolucione la rotura de su aductor derecho. Tendrá que estar cuatro semanas ausente y se perderá, con seguridad, las jornadas ante Real Sociedad, Real Mallorca y Real Betis, que se adelanta al martes 19 de abril debido a la final de la Copa del Rey entre los andaluces y el Valencia.
El regreso de Lucas Boyé no se espera antes de mayo, cuando las últimas cinco jornadas (Osasuna, Cádiz, Atlético de Madrid, Celta de Vigo y Getafe) terminarán por decidir los objetivos en Primera División. La lesión de Boyé obliga a que los otros tres delanteros del equipo den un paso al frente. Ezequiel Ponce, Pere Milla y Guido Carrillo tendrán que asumir el rol de nueve en el equipo en un momento crucial del curso en el que la permanencia está cerca, pero todavía no confirmada.