El servicio de Medicina Nuclear del Hospital Universitario del Vinalopó ha realizado más de 76.700 estudios desde la puesta en marcha del centro sanitario en el año 2010. Además, acumula más de 50.000 pruebas de PET-TAC.
Por otro lado, durante el pasado año el servicio incorporó dentro de la medicina nuclear convencional un equipo de última generación que permite fusionar dos técnicas de forma simultánea para poder realizar diagnósticos más precisos. El SPECT-TAC realiza al mismo tiempo una prueba radiológica que nos permite conocer la forma y tamaño de los órganos, y una prueba de medicina nuclear que permite obtener una imagen molecular: “Se trata de una prueba indolora que se realiza tras la administración de un radiofármaco (contraste) que nos permite realizar una evaluación del paciente”, ha explicado Pedro González, jefe del servicio de Medicina Nuclear, que ha añadido que ese nuevo equipo “es abierto, permitiendo una mayor confortabilidad para el usuario”.
Desde el centro hospitalario se ha destacado a través de un comunicado que su Servicio de Medicina Nuclear “cuenta con uno de los equipos médicos y tecnológicos más avanzados del sistema público sanitario” y que “desde su puesta en funcionamiento en 2011, ha sido el primer centro público de la provincia en contar con el servicio PET-TAC, tecnología que no es solo útil para diagnosticar la enfermedad, sino también para realizar un seguimiento del tratamiento oncológico de forma certera”.
Por otro lado, se ha añadido que en 2022 se puso en marcha la terapia metabólica ambulatoria de tumores neuroendocrinos que evita el ingreso del paciente y el desplazamiento a València: “En esta línea, este año tenemos previsto empezar con el tratamiento con lutecio para algunos tumores de próstata”, ha avanzado Pedro González.