Un reciente estudio multicéntrico realizado en la provincia de Alicante ha puesto de manifiesto una creciente y preocupante tendencia en la salud pública: la obesidad infantil y adolescente sigue en ascenso, convirtiéndose en un serio problema para la salud. Se han detectado casos de niños, con apenas 11 años, que han alcanzado pesos de hasta 140 kilos; y otros más pequeños, de seis años, con 60. Esta situación señala la urgencia de identificar y abordar los factores de riesgo asociados al desarrollo de esa obesidad infantil que, en muchos casos, están relacionados con el uso de las pantallas.
Causas de la obesidad infantil
Entre los factores causantes de la obesidad infantil, el estudio señala el incremento en el uso de dispositivos electrónicos, aumentando los periodos de tiempo frente a pantallas y, como consecuencia, la derivación en un estilo de vida sedentario entre los menores de edad. Esta vida sedentaria está directamente vinculada con el aumento de casos de obesidad infantil. También se ha observado que los problemas de sueño, que se agravan por el tiempo excesivo frente a las pantallas, son más comunes en niños y adolescentes con sobrepeso u obesidad, en comparación con aquellos de peso normal.
Un estudio multicéntrico en Alicante con la ayuda de la Universitat Jaume I de Castellón
El análisis se ha realizado en un trabajo conjunto entre varios centros, entre los que figura el de Sant Joan de Alicante, el de Elche o el de Vinalopó Salud, con la colaboración de la Universitat Jaume I de Castellón. El estudio se ha centrado en una muestra representativa de 70 niños y adolescentes de entre 5 y 16 años, la mayoría del Hospital Universitario Sant Joan d'Alacant y con Ana Pilar Nso como principal investigadora, revelando que aquellos menores con obesidad dedican una media de tres horas diarias a dispositivos electrónicos, frente a las dos horas de niños con peso normal. El 40% de los participantes con sobrepeso confirmó trastornos crónicos de sueño, con menor duración y calidad del descanso, mientras que solo un 8% de los niños de peso normal experimentó problemas similares de sueño.
El uso de dispositivos electrónicos dispara la obesidad infantil
El estudio concluye que por cada hora adicional frente a la pantalla, se triplica la probabilidad de ser obeso y aumenta en un 60% la probabilidad de tener problemas de sueño. Estos resultados confirman la necesidad de aumentar la educación sanitaria dirigida a las familias, sobre todo con la importancia de establecer límites saludables en el uso de dispositivos electrónicos y promover hábitos de sueño adecuados, como medidas preventivas contra la obesidad infantil y adolescente.
