Pablo Machín lo quiere volver a hacer. El nuevo técnico franjiverde recordó en su presentación cómo fue capaz de remontar una situación mucho peor que la del Elche en su primera temporada al frente del Girona. El técnico, en su primera experiencia lejos de su Soria natal, llegó con un equipo que era colista y al que logró salvar del descenso tras remontar una desventaja de ocho puntos en los últimos once partidos.
Machín recordó ayer, durante su primera comparecencia pública como entrenador del Elche, que cree en la que salvación porque ya había superado "una situación similar". "Cuando salí de Soria, siendo un entrenador desconocido, me gané una oportunidad con el Girona al que cogí colista, a falta de 13 jornadas, cuando estaba a ocho puntos de la salvación y logramos sacarlos del descenso", explicó.
En realidad, cuando llegó a aquel banquillo del Girona quedaban 13 partidos en Segunda División y el equipo catalán, colista, estaba a cinco de la salvación. Su estreno fue con dos derrotas seguidas, ante Real Murcia (0-1) y Sporting de Gijón (3-1). La salvación se alejó a ocho puntos y tras una racha espectacular de seis victorias, tres empates y dos derrotas, logró mantener al Girona con 51 puntos, dos por encima de Mirandés, que marcó la zona descenso, si bien aquella campaña bajaron Real Madrid Castilla, Real Jaén y Hércules. El cuarto descendido fue el Real Murcia, por temas administrativos.
A partir de ahí, estuvo tres temporadas consecutivas en el Girona, al que convirtió en un sólido aspirante al ascenso a Primera División, objetivo que logró al tercer intento y después de haberse quedado a las puertas en las dos campañas anteriores. Tras mantenerlo en la máxima categoría, Machín dio un gran salto al Sevilla, donde empezó bien pero terminó siendo víctima de los malos resultados, como también le sucedió en las dos campañas siguientes a los mandos de Espanyol y Alavés.
En los dos últimos años ha estado trabajando en Arabia Saudí, en el Al-Ain y Al-Raed, como paso previo a su regreso a España donde aspira a recuperar el camino salvador de aquel Girona para sacar a flote al Elche.